La dilatada experiencia en el sector y un alto componente tecnológico permiten a Acciona aportar soluciones idóneas para resolver los problemas derivados de la gestión del agua en los procesos industriales.
El desierto de Atacama está considerado como el más árido del planeta. El Valle de Copiapó, enclavado en esa zona, ha sido históricamente un oasis minero, aunque su clima ha permitido incluso un floreciente desarrollo agrícola y de hecho, cada año se origina la primera cosecha frutícola del país. En las décadas de los 80 y 90 se intensificaron tanto la minería como la agricultura, lo que redundó en el cuasi agotamiento del agua en la zona.
Hoy en día, hay más de sesenta explotaciones mineras en el valle y constituyen el principal motor de la economía y responsable de cerca del 50% del PIB de la región. En este lugar, precisamente, obtuvo Acciona uno de sus contratos más relevantes de gestión integral del agua para clientes industriales.
Entre las múltiples capacidades de Acciona se encuentra el llevar a cabo la gestión de servicios integrales, que abarca todas las etapas implicadas en el tratamiento del agua, ya sea para una población o para una industria. En este último caso, “pretendemos ser un jugador clave a la hora de ofrecer una solución integral del ciclo de agua a nuestros clientes”, afirma Carlos Vergara, Director de Clientes Industriales de Acciona.
¿En qué consiste? Como sucedió en Atacama, el cliente industrial necesita agua durante todo el proceso productivo, pero el tipo de tratamiento que requiere depende del negocio al que se dedica y de la fuente de dónde provenga esa agua. Acciona tiene en cuenta ambos factores y, basada en su dilatada experiencia y excelencia tecnológica permite ofrecer unas soluciones idóneas para dicho tratamiento.
El agua es necesaria en muchos procesos de generación energética, para la obtención y procesado de muchos minerales y, en general, en gran cantidad de procesos industriales. “En los últimos años, el cliente industrial ha tendido en estos temas al outsourcing y, en la actualidad, la única manera de llegar a prestarle un servicio eficaz es ofreciéndole la gestión integral del ciclo del agua, algo en lo que Acciona tiene gran experiencia”, apunta Vergara.
Así es como después de visitar diferentes operaciones mineras y analizar las necesidades reales de los clientes en sus plantas de tratamiento, en estas zonas en donde al agua es considerada un elemento crítico, Acciona Agua ya cuenta con dos Contratos de Operación, Servicios y Suministros bajo el concepto de Gerenciamiento Integral del Ciclo del Agua, en el segmento industrial minero del desierto de Atacama.
Las empresas SCM Franke -perteneciente a la multinacional KGHM- y Minera Las Cenizas han confiado la operación de sus plantas de tratamientos de agua a Acciona. En el caso de SCM Franke se trata de una planta desaladora de agua salobre por ósmosis inversa (BWRO) que produce agua potable para el campamento minero y agua de procesos para su planta de extracción de cobre (SX-EW). En Minera Las Cenizas es una planta desaladora de agua de mar por ósmosis inversa (SWRO) que produce agua de procesos para la etapa de electrobtención de cátodos de cobre (EW). Ambos proyectos se encuentran ubicados en pleno desierto de Atacama, en el Distrito Minero de Altamira, en Chile.
Copiapó, un caso emblemático
Hace tres años, el grupo chileno Compañía Minera del Pacífico (Grupo CAP) encargó a Acciona la realización de las conducciones de agua y concentrado relacionadas con el proyecto minero Cerro Negro Norte, en el Valle de Copiapó, en la III Región de Atacama, Chile.
El proyecto supone el desarrollo de una solución completa para el sistema de transporte de concentrado de hierro desde la planta minera hasta la planta de filtros, ubicada en Puerto Punta Totoralillo, a través de una instalación especial denominada concentraducto. Además, se ocupa de solventar el sistema de impulsión de agua mediante una tubería de acero y un sistema de bombeo en serie desde la desaladora, ubicada en la costa, hasta la planta minera, que transportará el agua necesaria para sus operaciones. El presupuesto del proyecto asciende a 143 millones de dólares, unos 104 millones de euros al cambio actual.
Acciona había obtenido unos meses antes el contrato para el diseño, construcción, puesta en marcha y operación durante veinte años de una desaladora de agua de mar en el Valle de Copiapó, en la III Región de Atacama, Chile. El proyecto surgía de la necesidad de asegurar el agua en las operaciones mineras de dicha Región y suponía una inversión de 63,5 millones de dólares (más de 46 millones de euros al cambio actual).
La planta tendrá una capacidad de 200 litros/ segundo (17 millones de litros al día), que podría aumentar hasta 600 litros/segundo (52 millones de litros al día). La puesta en marcha de una desaladora en la zona cobrará una importancia relevante como solución hídrica para la actividad empresarial.
Fuente : https://www.eleconomista.es/
