Cumplir las exigencias de los permisos ambientales le cuesta a la empresa cerca de US$ 200 millones al año.
Un estado de suspensión temporal adoptaría pronto el proyecto binacional de oro, cobre y plata, Pascua Lama, ubicado en la Región de Atacama, y de propiedad de la canadiense Barrick Gold. La iniciativa está paralizada desde 2013, pero la compañía gasta cerca de US$ 200 millones anuales en mantener las instalaciones construidas y cumplir con las exigencias de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
Fuentes de gobierno explican que la suspensión de actividades tiene un límite menor a cinco años. Esto le permitiría a Barrick ahorrar más del 30% del gasto anual en la obra. Aún así, la minera debe seguir cumpliendo con sus obligaciones ambientales durante ese lapso.
El viernes 24 de julio se anunció la salida de Eduardo Flores de la firma, tras dos años como director ejecutivo de Barrick Chile, y la llegada de René Muga, quien hasta entonces se desempeñó -aunque por un corto lapso- como director de asuntos corporativos de la compañía. Cercanos comentan que el movimiento ejecutivo obedeció a que requerían de un profesional con amplias redes y habilidades de negociación para alcanzar su objetivo, perfil con el que calza Muga.
La canadiense tiene Pascua Lama y Zaldívar en Chile. La semana pasada vendió a Antofagasta Minerals el 50% de este último yacimiento. En tanto Cerro Casale, proyecto que contemplaba una inversión por US$ 5.200 millones, quedó en el congelador.
Consultada la compañía respecto de la decisión de suspensión del proyecto binacional, Muga comentó que Barrick a nivel mundial está en un plan de reducción de costos que incluye Pascua Lama. “Estamos analizando los procedimientos administrativos para finalizar la suspensión en la que estamos, mientras trabajamos en la optimización del proyecto para retomarlo en el futuro cuando exista un escenario más favorable con mejores condiciones de mercado. La decisión que tomemos será cuidando el medio ambiente, a nuestros empleados y ajustándonos estrictamente a la legislación vigente. Mantener la RCA es esencial para llevar adelante el proceso de optimización”, señaló el director ejecutivo de Barrick Chile.
Cercanos a la firma comentaron que, en línea con el plan de reducción de costos, actualmente el foco está en la venta de algunos activos del grupo a nivel mundial, y en hacer los procesos más eficientes, ya sea reduciendo personal o cerrando algunos contratos de servicios.
UN CAMINO COMPLEJO
El proyecto Pascua Lama ha sido complejo. La iniciativa contempla una inversión por US$ 8 mil millones y a la fecha se han ejecutado cerca de US$ 5 mil millones.
En abril de 2013, luego de seis años de construcción, se detuvieron las obras en Chile, primero por decisión judicial, y luego por la paralización indefinida decretada por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA). Esta última, luego sancionó con 16 mil UTA a Pascua Lama, lo que el Tribunal Ambiental pidió recalcular, aunque todavía no hay resolución final. Pascua Lama suma dos años en conflicto, especialmente con las autoridades y las comunidades y sin avanzar en las obras.
Fuente: Minería Chilena
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