“No está congelado, está en revisión”. La frase se repite varias veces de boca de Jorge Labra, presidente del Grupo Hispano Chilena y socio fundador de Ciudad Empresarial. Apunta al nuevo y millonario plan de inversiones que tiene en carpeta el conglomerado para ampliar el mentado polo de oficinas ubicado en Huechuraba, en el sector norte de Santiago.
Los desarrolladores de Ciudad Empresarial tienen entre manos desde hace varios años un nuevo plan maestro para al menos duplicar el tamaño del complejo y transformarlo -según sus palabras- en un nuevo barrio del sector oriente de la capital, con más edificios de oficinas y residenciales, además de nuevos polos de comercios y hotelería.
La idea es aprovechar el desarrollo de grandes obras de infraestructura en la zona, que ayudarían a reducir los largos tacos y permitirán acercar este sector de la capital al centro de Santiago. Estos son el teleférico que unirá Providencia con Huechuraba en apenas 13 minutos, y que se espera esté operativo en 2023, además de la nueva autopista Américo Vespucio Oriente, que se espera podría debutar durante el segundo semestre del próximo año.
Sin embargo, hasta ahora, visiblemente, no ha habido mucho movimiento en el desarrollo del nuevo master plan en este polo de desarrollo inmobiliario al norte de la capital, a un costado del cerro San Cristóbal.
Incluso, en la industria se comenta que el proyecto conocido como Ciudad Empresarial 2.0 está completamente paralizado, congelado.
Algo no menor, dice un actor del sector inmobiliario, considerando que la inversión asociada se estima en unos US$ 800 millones, la que sería desplegada en un plazo de 15 años.
A ello Jorge Labra insiste: “El proyecto no está suspendido. No es que esté muerto ni mucho menos. La idea nuestra es continuar con el plan, pero, a veces, las obras tienen sus momentos. Hoy día estamos revisando completamente el plan de inversiones”.
Todo, dice el empresario, como consecuencia de la pandemia y los efectos que ha generado en el negocio inmobiliario, particularmente en las oficinas.
La repentina irrupción del teletrabajo hizo que muchas empresas dejaran de usar parte importante de sus dependencias corporativas; varias, simplemente las devolvieron. Esto derivó en un fuerte salto en la tasa de vacancia, que ya alcanzó el 10% en promedio en Santiago. Y se espera que siga subiendo.
Incluso, desde Colliers se pronostica que se evidenciará más liberación de superficie arrendable de oficinas, con lo cual se podría llegar fácilmente al 15% de vacancia hacia el cuarto trimestre de este año.
A modo de comparación, y en base a los datos de la firma de intermediación, en el tercer trimestre de 2015 se registró una vacancia de 13,3%, que es la más alta hasta ahora dentro de sus registros.Frente a esto, la decisión de levantar nuevos edificios de oficinas está siendo analizada con lupa. Por todos los actores de la industria.
“Nos preocupa la vacancia en oficinas; es un factor importante”, reconoce Jorge Labra, quien indica que, según sus registros, la vacancia en Ciudad Empresarial está actualmente en el orden del 15%. “Nos han devuelto oficinas, pero también se han arrendado”, destaca.
Qué pide el mercado
Académicos de las universidades de Stanford, Chicago y del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) plantearon -en su estudio “Por qué trabajar desde casa se mantendrá”- que el 20% de los días laborales completos se trabajará desde la casa luego del Covid-19, sobre el 5% anterior a la crisis y bajo el 50% alcanzado con la pandemia.
“La gente aún no sabe cómo va a ser el mercado de las oficinas después de la pandemia”, señala la cabeza del Grupo Hispano Chilena. Y si bien aún no está claro que porcentaje será teletrabajo y cuánto presencial, sí hay certeza, dice, de que se deberán desarrollar nuevos formatos de oficinas. Techos más altos, que potencian la percepción de amplitud, y terrazas más grandes son solo algunas de las variables bajo análisis.
“Estamos viendo con arquitectos lo que está pasando en Estados Unidos y en Europa, evaluando cómo van a ser las oficinas en el futuro”, explica Labra. “Nos ha tomado muchísimo tiempo porque estamos analizando el tipo de oficinas que se requerirá para generar sentido de pertenencia y se pueda atraer a jóvenes talentos para que vuelvan a las oficinas”, añade.
El empresario dice que Ciudad Empresarial, que partió como un proyecto de oficinas en terrenos inexplorados en 1997, tiene un “gran potencial” y que, cuando terminen todos los análisis, ofrecerán un “producto del siglo XXI”.
“Estamos trabajando más que si no hubiera pandemia”, asegura Labra. “Vamos a adecuar nuestro proyecto a lo que pide el mercado. Por eso estamos analizando qué pasa con los mercados de oficinas, viviendas, equipamiento y la hotelería”.
Tan confiado está el empresario, que afirma que el nuevo master plan partirá entre los años 2022 y 2023, “cuando esté terminada la autopista AVO y el teleférico”, remata.
Fuente: DF Mas
