De aprobarse el planteamiento del directorio, la constructora nacional, protagonista de los casos Lava Jato y Club de la Construcción, cambiará de nombre tras 87 años de su fundación.
Recordemos que la empresa nacional ya había adelantado en febrero de este año, a través de un video, que se cambiaría de nombre. En dicho spot, GyM pidió perdón a los peruanos por “los daños causados, las malas decisiones o los actos ilícitos de ejecutivos que ya no están en la organización”.
“No queremos quedarnos callados, menos olvidar todo lo que pasó. Estamos comprometidos con el Perú y estamos colaborando con la justicia, con total transparencia, en todo lo que se necesite, para que se pague lo que se tenga que pagar. Desde ahora, ya no somos Graña y Montero. Ese nombre ya no nos representa”, dice la compañía en el material difundido.
Así, en un documento de la constructora peruana al que accedió el mencionado periódico, “el Directorio propone a la Junta General de Accionistas de la sociedad, modificar la denominación de la misma a Aenza S.A.A. y como consecuencia de dicha decisión, modificar el Artículo 1 del estatuto social”.
De esta manera, de aprobarse este planteamiento del directorio, la constructora cambiará de nombre tras 87 años de su fundación.
A través de un comunicado, Graña y Montero manifestó que los accionistas decidirán si modifican o no la denominación social en la Junta General que se llevará a cabo el próximo 2 de noviembre.