Una vez edificado durante el primer trimestre en 2019, soportará 20 millones de m3 y asegurará el riego a 1.500 hectáreas.
Valle Hermoso, en la comuna de Combarbalá, es uno de los tres grandes embalses más avanzados dentro del Plan Nacional de Aguas anunciado por el Gobierno –el resto son Punilla, en Bíobío y Chironta, en Arica y Parinacota– durante marzo del 2015.
Su construcción, dice el secretario de la Junta de Vigilancia del Río Pama, Gustavo Hernández, permitirá el riego a 1.550 hectáreas con un 85% de efectividad. Esto, luego de una inversión de casi $47 mil millones proyectados al primer semestre en 2019, cuando la represa estaría finalizada.
“Es de vital relevancia porque hoy no tenemos ninguna posibilidad de captar el agua de lo que ha llovido, vemos pasar el agua. El Cogotí está lleno y nosotros ya no tenemos agua”, sostiene Hernández, quien detalla que los 20 millones de m3 que podrá almacenar en su interior, ayudarán a unas 7 mil personas, entre agricultores, crianceros y el gentío de las 29 localidades que verán nutrido sus sistemas de agua potable rural con el vital elemento.
El salto no es menor considerando que el río Pama alcanza a irrigar a la fecha solo 100 hectáreas, principalmente de uva de mesa y vid de exportación. Aún más considerando que la sequía “nos obligó a cortar hectáreas de paltos, limones y otros cultivos”, concluye.
A juicio de la seremi de Obras Públicas, Mirtha Meléndez, otro beneficio comenzará a experimentarse a fines de este año, debido a que la edificación del acuífero incrementará los puestos de trabajo, pasando de los 200 cupos actuales a 1.500 plazas de trabajo.
“Teníamos aproximadamente como 200 empleos, pero (la cifra) estaba subiendo porque ahora tenemos un Peak. Se puede llegar a 1.500 personas”, cuenta la autoridad regional. Agrega que dicho periodo coincidirá con la etapa de construcción del muro y las obras anexas a la represa.
Según el cronograma de construcción, Valle Hermoso posee un 28% de avance físico, donde ya están plenamente habilitados algunas de las obras de faenas -oficinas del contratista e inspección fiscal, casa de vigilante y campamento-; excavaciones en el evacuador de aguas y los accesos terrestres al sitio.
Pendientes están los siguientes ítems, tales como la colocación de tuberías (24,3%); relleno con hormigonado (10,3%) y rellenos de la represa (5%).
Fuente: Semanario Tiempo
